Siempre me ha fascinado el mundo de la artesanía.
Lamentablemente hoy en día es un “arte” muy castigado y abandonado en muchos
casos, aunque confío que “no todo se pierda”. Con la revolución industrial
algunos de esos oficios se perdieron en la noche de los tiempos, así que cada
vez que descubro uno, me emociona. En este caso además fue por sorpresa, como
suelen ocurrir las mejores experiencias.
Dentro del programa de #Ruraltrip16 teníamos previsto una
visita a las Bardenas Reales, de las que os hablare en breve. El día amaneció
algo lluvioso y mientras desayunábamos en las Casas Cuevas de Valtierra, su
propietario Ruben Mendi, nos sugirió que podíamos pasar antes a ver las Escobas
de Mijo que confeccionaba su hermano a escasos metros de ahí en su taller de
artesanía. No os negare que la emoción que me inundo fue enorme y que a mis
compañeros de viaje se les ilumino una gran sonrisa también. Os confesare que
yo colecciono brujas hace mucho tiempo así que el “rollo” escobas, me
transporto casi como a ellas por el cielo de la #RiberaNavarra.
David, nuestro simpatiquísimo guía de Bardenas que había
pasado a recogernos, no solo apoyo la propuesta sino que además nos animo a
ella, así que miel sobre hojuelas…cogimos nuestros petates y rumbo al taller de
Escobas Mendi.
Ubicado en una de las callejuelas de Valtierra, tras una
puerta metálica nos esperaba Miguel Mendi, el “artista” y único artesano de
escobas de mijo que queda en España. Nada mas entrar ya puedes ver la cantidad
de escobas terminadas o preparadas que tienen. Madre
miaaaaaaaaa si que se barre…a juzgar por la cantidad de escobas que tienen. Fue
algo que me sorprendió, teniendo en cuenta la cantidad de “modelos” de plástico
y demás materiales que hoy en día se utilizan, pero todo tiene una explicación
y la descubriréis mas adelante.
El mijo que utilizan es un robusto cereal que cultivan en la
propia localidad. El proceso de confección tiene unos marcados pasos a seguir,
como si de un acompasado vals se tratase, 1 ,2,3…..1, 2, 3….. Ayudado de alguna
maquina pleistocenica en muchos casos, Miguel elabora una a una cada escoba.
Primero coloca en el palo de pino un hilo de alhambre alrededor del cual va
enganchando el mijo en diferentes posiciones para ir dando forma. Después se
cose con cuerdas el mijo para que quede bien sujeto, se cepilla la escoba y lo
último es cortarlo con una guillotina para
que queden perfectamente rectas. Y como si se tratara de una gran fabrica aquí
también hacen su control de calidad. ¿Cómo saber cuándo una escoba esta en
óptimas condiciones de fabricación? Cuando al ponerla de pie, ella sola se sujeta…ese
es el indicativo.
Os diré que es un gusto ver con que mimo y concentración
trabaja. Pero no solo hace escobas a tamaño natural vamos a decir, sino que
elabora pequeñas escobitas a modo de detalle para colocar en el coche o en
algún rincón de casa, escobas para chimeneas, escobas redondas, escobas de
decoración, incluso personalizadas, lápices escoba, de estos últimos no pudimos
ninguno de los que allí fuimos quedarnos sin comprar unos cuantos para nuestros
seres queridos y amigos. También hacen las pequeñas escobas que ilustran el
cuento infantil de la ratita presumida. Vamos que su porfolio de productos es
amplio. Seguro que es ahora donde os preguntareis donde podéis encontrarlas. Lo
mejor, ir allí a visitarlo y adquirirlas en el propio taller, pero como Miguel
es un joven visionario, vende sus escobas a través del titan Amazon, de ahí que
tengan tantos pedidos no solo de España sino del extranjero, por eso veis
tantas y tantas. Es una alegría saber que quizás ese precioso porche de la
campiña francesa, o ese chalet de madera en pleno Tirol, es barrido por una
escoba hecha en Valtierra. Estas escobas viajan no llevadas por las brujas…sino
por el “brujo” amazon a todos los rincones del mundo, gracias a las manos
artesanas de la Familia Mendi, generación tras generación.
Y esta para mi la joya de la corona. Una escoba de autentica bruja....para mi que esta fijo que vuela... jajaja
Es impresionante el trabajo que realizan. ;)
ResponderEliminarHelena es una lástima que los productos artesanales estén tan castigados por los fabricados en serie. Hace mil que no veo una escoba "de las de toda la vida" y hasta me ha emocionado ver tu post (a la vez de descubrir tu blog)
ResponderEliminarYo quiero una escoba de bruja de esas ¡me encantan!
¡Besos mil!
PD. Si te apetece te invito a mi cocina
Hola Cuca, me alegra mucho que te guste el post y mas cuando me dices que hasta te has emocionado, esa es una fantastica sensacion..mil gracias por transmitirmelo.
ResponderEliminarOjala duren muchas generaciones mas y se aprecie muchos mas años toda esta labor que hacen los artesanos.
Si de verdad quieres una escoba de bruja ya sabes...ponte en contacto con ellos en la web....llegara volando una escoba donde te encuentres...no lo dudes.
Saludetes